lunes, 9 de enero de 2012

Adiós 2011. Bienvenido 2012 !

No creo que la Navidad sea una época especial en la que las personas se demuestran que se quieren, si no que, las que lo hacen de verdad, lo demuestran todos los días.
Es tiempo de afrontar un nuevo año de hacer planes y ridículas listas de propósitos que jamás completarás, es tiempo de dejar el pasado atrás, de vivir el presente al máximo y de soñar con el futuro que está por venir.
Por eso quiero dar las gracias a todas esas maravillosas personas, las que siguen ahí, las que luchan contra viento y marea, las que mueven cielo y tierra, las que no se rinden, las luchadora. Sois los mejores, de verdad.
Las que te quieren y te entienden, pero a pesar de todo no pueden estar a tu lado, por diferentes obstáculos, o situaciones. Esas son las que más duelen, los "imposibles". Os diré una cosa, no me importa cuántos quilómetros nos separen ni cuántas leguas de viaje submarino, yo siento, yo no olvido, yo os echo de menos y sobre todo, os guardo un huequecito aquí en mi corazón, por si alguna vez lo queréis, que sepáis que es vuestro.
También quiero despedirme de aquellas personas que ni si quiera recuerdas cuando entraron en tu vida pero que desde luego es inevitable que se vayan, su naturaleza actúa sin previo aviso, como un bofetón cuando menos te lo esperas. Esas que te han dado tanto, y que a la vez te lo han quitado todo, a las que has querido más que a nada, con las que has pasado los mejores momentos pero también has cometido el mayor error de todos: dar por hecho que el sentimiento es mutuo, sin que te lo digan. Pero así es la vida, ahora solo puedes decir un diminuto "adiós" disfrazado de un "espero que todo te vaya bien". Y en verdad que lo espero, lo deseo, porque personas así acaban solas, y eso si que no se lo deseo a nadie. ¿Rencor? Que va, yo no guardo cosas inútiles en mi corazón. Sé que el sentimiento de arrepentimiento llega, quizás tarde en aparecer, eso no lo sé, ya no sé nada, ya no te conozco, pero tranquila amor, el tiempo pone las cosas en su lugar, el tiempo todo lo cura. Ahora si que diré algo que no puedo evitar, lo siento, pero me sale solo, por mucho que intente odiarte, y es que te quiero.

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